El Departamento de Justicia anunció que abrió una investigación contra el Departamento de Policía de Louisville, en Kentucky, por la muerte hace más de un año de la joven afroamericana Breonna Taylor, que estaba en su casa cuando agentes le dispararon por error.

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Esas pesquisas serán responsabilidad del fiscal general de EE.UU., Merrick Garland. El objetivo será determinar si la policía de Louisville siguió algún "patrón" o "práctica" que pudiese ser ilegal, según informó la Casa Blanca en un comunicado.

Es la segunda investigación de este tipo en una agencia de aplicación de la ley por parte de la administración del presidente Jor Biden en una semana.

Garland también anunció una investigación sobre las tácticas de la policía en Minneapolis tras la muerte de George Floyd. 

El fiscal general ha dicho que todavía no hay igualdad de justicia bajo la ley y prometió llevar una mirada crítica al racismo y los problemas legales cuando asumió el cargo. Pocas investigaciones de este tipo se abrieron durante la administración del expresidente Donald Trump.

La investigación anunciada este lunes es contra el Gobierno Metropolitano del Condado de Louisville-Jefferson y el Departamento de Policía Metropolitana de Louisville. 

Esta ocasión se busca determinar si existió un patrón o práctica de vigilancia policial inconstitucional o ilegal y se realizará una revisión más amplia de todo el departamento de policía de Louisville.    

En el caso de Taylor, la afroamericana murió a tiros el 13 de marzo de 2020 cuando tres policías anglosajones entraran en su apartamento para llevar a cabo una orden de registro presuntamente en busca de estupefacientes, que no aparecieron.

Ese anuncio se produjo en el contexto del juicio del caso Floyd, luego que el exagente  Derek Chauvin fuese declarado culpable del asesinato del afroamericano.