Las Víctimas de la represión de Estado (18-O), la Asamblea Coordinadora de Estudiantes Secundarios (Ases) y familiares de las víctimas anunciaron este martes que tomarán permanentemente el Instituto de Derechos Humanos de Chile como reclamo ante la falta de respuestas del Gobierno encabezado por Sebastián Piñera.

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“Hemos denunciado que esta institución no se ha encargado de su rol y ha sido cómplice pasivo de las violaciones sistemáticas de los derechos humanos lideradas desde el Gobierno, no han sido capaces de responder a nuestras demandas a pesar de que las hemos presentado en reiteradas ocasiones”, reza el comunicado emitido por los manifestantes.

Las organizaciones en protesta han dado 24 horas al Instituto para que desalojen y retiren todos los documentos e implementos necesarios pues el edificio pasará a ser sede popular.

Antes de esto, la toma había sido temporal durante cinco meses donde exigían dialogar con las autoridades para el reparo y las garantías de la no repetición de las violaciones de los derechos humanos en el país austral.

Los voceros de los organizadores de la toma afirmaron que esta pasará a manos del pueblo para que las organizaciones sociales y populares puedan actuar y responder a las demandas que por el momento el presidente saliente Piñera no ha hecho.

Entre octubre de 2019 y marzo del 2020, periodo por el que se extendieron las protestas en el marco del estallido social en Chile, se registraron al menos 34 fallecimientos además de que, los datos del propio Instituto de Derechos Humanos de Chile arrojaron que al menos 460 personas sufrieron daños oculares mientras que 35 perdieron alguno de sus ojos.