Los combates entre la fuerzas azerbaiyanas y armenias en la zona de Nagorno Karabaj entraron este miércoles en su cuarto día sin visos de que disminuyan de intensidad, mientras ambas partes intercambian acusaciones sobre sobre nuevas hostilidades.

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Tanto la parte azerí como armenia no ceden en sus intenciones sobre una negociación pacífica sobre el territorio en disputa cuando la comunidad internacionales insiste a ambas naciones.

"En estos momentos se libran combates en toda la línea del frente", señaló este miércoles el Ministerio de Defensa de Azerbaiyán en un comunicado.

Por su parte, Armenia denunció que Azerbaiyán bombardea las posiciones armenias en el norte de Nagorno Karabaj.

El primer ministro de Armenia, Nikol Pashinián, manifestó este miércoles durante una rueda de prensa que su país está en la disposición de resolver el conflicto por la vía pacífica.

Seguidamente, Pashinián señaló que desde Armenia no ven la posibilidad de llevar a cabo un dialogo en el que se encuentre Azerbaiyán debido al recrudecimiento de las hostilidades que ha dejado un centenar de muertos por el control de la región de Nagorno Karabaj.

Armenia y Azerbaiyán se culpan recíprocamente por las agresiones que dejaron más de 30.000 decesos durante 1990. No obstante cuatro años después se firmó una tregua.

En ese contexto, el Gobierno de Rusia llamó a Bakú y a Ereván a establecer un cese del fuego, así como a mantener la calma a otros países de la región, declaró este miércoles el portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov, quien resaltó que "no se debe atizar el fuego" del conflicto en Nagorno Karabaj.

"Seguimos pidiendo a los países de la región que actúen con moderación, y especialmente instamos a los países que participan en el conflicto a un cese inmediato" del fuego, declaró Peskov en una rueda de prensa.

En ese sentido, el ministro de Exteriores de Rusia, Serguéi Lavrov, llamó a un cese inmediato de hostilidades en Nagorno Karabaj durante las conversaciones telefónicas que mantuvo con sus homólogos de Armenia y Azerbaiyán, Zograb Mnatsakanián y Ceyhun Bayramov, comunicó la Cancillería rusa.

"Se debatió el desarrollo de la situación en la zona del conflicto de Nagorno Karabaj. Rusia expresó su profunda preocupación por las continuas hostilidades de gran escala. Se hizo un llamamiento a cesar el fuego de manera inmediata y reducir la tensión, así como a evitar una retórica provocativa y beligerante", dice el comunicado.