Miles de argentinos pidieron abandonar la Iglesia católica tras la negativa de la entidad religiosa de otorgar derechos como el matrimonio igualitario, el voto femenino, divorcio, aborto y otras libertades que sí acepta el Estado laico. 

La Coalición Argentina por un Estado Laico (Cael) afirmó que este viernes 24 de agosto entregará a la Conferencia Episcopal una lista firmada por más de 4.000 argentinos, quienes desean iniciar el trámite de apostasía (proceso oficial para que un bautizado abandone el catolicismo).

"La Iglesia se ha opuesto a todas las iniciativas de reconocimiento y ampliación de derechos, como el voto femenino, el divorcio vincular, el matrimonio civil y el igualitario, la identidad de género, la fertilización asistida y la legalización del aborto", alegó Cael por medio de un comunicado.

Los representantes del movimiento laico explicaron que la idea es que la iniciativa colectiva se convierta en una medida política para independizar el Estado de la Iglesia con el objetivo de avanzar en derechos e ideas progresistas, como la despenalizaron del aborto (proyecto rechazado por el Congreso recientemente).

"Se nos ocurrió generar apostasías colectivas ya que, si bien la apostasía es un hecho individual, el hecho que fueran colectivas las convierte en un hecho político", dijo la activista de Cael, Analía Mas.

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"El Estado laico es el único que garantiza que la ciudadanía pueda desarrollar el plan de vida que considere más apropiado para sí", agregó la organización argentina.

De acuerdo con cifras de la Secretaria de Género y Laicismo de la Federación Argentina de Lesbianas, Gays, Bisexuales y Trans horas después de la desaprobación del aborto asistido en el país, casi 1.300 ciudadanos pidieron apostatar.

Asimismo, el pasado sábado cientos de argentinos se concentraron en Buenos Aires, capital, y en otras ciudades del país para "darse de baja", desvincularse de la Iglesia católica en el marco del evento Apostasía Colectiva 18.