En el presente año Venezuela desarrollará una serie de políticas económicas que van en dirección de contraofensiva, para así superar la guerra no convencional denunciada por el Gobierno y tener una economía no dependiente del petróleo.

2017 es "el año de la contraofensiva económica, de la construcción de una economía, real, independiente, soberana y robusta", indicó el vicepresidente del Área Económica de Venezuela, Ramón Lobo.

Entrevistado por la Agencia Venezolana de Noticias (AVN) Lobo pronosticó un 2017 de recuperación económica, basado en el nuevo modelo diversificado que el Gobierno suramericano busca construir con los 15 motores de la Agenda Económica Bolivariana.

Entre las medidas a tomar, está "la normalización del aparato productivo para generar los bienes, productos y servicios que demanda el pueblo venezolano".

El Gobierno ha trazado -indicó Lobo- cinco líneas de trabajo en el eje económico que son: recuperación del crecimiento económico e integral, optimizar la seguridad, fortalecer las misiones socialistas, impulsar un plan especial de obras públicas y la construcción del nuevo poder popular.

Durante la entrevista, Lobo ofreció un balance sobre las acciones implementadas en enero por el presidente Maduro para dinamizar el aparato productivo en función de las bases que se formaron en 2016 para comenzar a superar el rentismo petrolero.

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Entre las acciones mencionó la incorporación progresiva de los billetes pertenecientes a la ampliación del cono monetario, que incluye las denominaciones de 500, 1.000, 2.000, 5.000, 10.000 y 20.000 bolívares.

"Superamos el sabotaje y ya están circulando entre los usuarios, los bancos y comercios las nuevas especies de la ampliación del cono monetario", destacó el vicepresidente del Área Económica.