El expresidente de Brasil Luiz Inácio Lula da Silva fue absuelto de uno de los procesos judiciales que enfrenta. Se trata de la causa por obstrucción a la justicia, por supuestamente haber actuado para impedir o alterar la delación del exdirectivo de la empresa semiestatal Petrobras, Néstor Cerveró. 

La sentencia de inocencia fue dictada por el juez Ricardo Leite, del décimo Tribunal Federal de Brasilia. Esta acusación contra Lula se dio con base a la declaración prestada por el exsenador Delcídio do Amaral, quien dijo haber intentado sobornar a un testigo de una investigación por pedido expreso del exmandatario. No obstante, la justicia brasileña ha reconocido que no hay pruebas para justificar esta causa. 

Con este reconocimiento del Ministerio Público y de la Justicia de Brasil, solo queda contra Lula la única condena del juez Sérgio Moro por el caso del tríplex de Guarujá, por la cual, se encuentra detenido desde hace más de 90 días. 

La defensa de Lula insiste que las causas judiciales contra Lula son una persecución para tratar de impedir que el exmandatario regrese a la Presidencia. 

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Entretanto, el líder del Partido de los Trabajadores (PT) ha ratificado, desde prisión, que no abandona sus aspiraciones de llegar a la Presidencia de Brasil, de cara a las elecciones que se celebrarán en octubre. Asegura que pretende devolver la soberanía y dignidad nacional.

Pese a permanecer en prisión, Lula se perfila como el candidato favorito para Gobernar el país, con una amplia ventaja respecto a los otros aspirantes.