Este sábado autoridades de Irak informaron el deceso de 12 policías y cincuenta reos tras un motín propiciado por miembros del autodenominado Estado islámico (EI) en la prisión Al-Khalis, ubicada al noreste de Bagdad. 

Se conoció que integrantes del Estado Islámico, usaron explosivos para liberar a 30 presos y entrar en los almacenes de armas de la cárcel. En la rebelión lograron escapar decenas de reclusos aunque no se detalló la cantidad exacta.

El alcalde de la ciudad, Al-Oudi Khadran, manifestó que "ISIS (para referirse al EI) fue responsable de las muertes y de la liberación de sus prisioneros".  

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Por su parte el jefe de del comité de seguridad de la gobernación de Diyala, precisó que se desconocía si en el recinto se encuentra privado de libertad algún prisionero de alto perfil. 

Una fuente policial detalló que "los reclusos empezaron a pelear entre ellos, lo que atrajo la atención de los guardias que fueron a separarlos (...) luego los prisioneros los atacaron, les quitaron las armas y comenzó un motín. También lograron capturar el armamento de la prisión". 

Las autoridades se encargaron de hacer redadas alrededor del penal, para recapturar a los convictos fugados.

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