Las fuerzas de seguridad iraquíes hallaron una fosa común con más de 100 cadáveres en su interior en la ciudad de Mosul, en el norte de Iraq, informaron las autoridades de la localidad norteña de Nínive.

El responsable del gobierno provincial de Nínive, Zahed al Jatuni, explicó que los cadáveres son de personas que fallecieron por la explosión de minas cuando trataban de huir de los barrios occidentales de la ciudad, controlados por el grupo terrorista autodenominado Estado Islámico (Daesh en árabe).

Jatuni apuntó que entre los muertos se encuentran mujeres y niños, que entraron en esos campos minados mientras huían de los terroristas. El Daesh minó esa zona de la ciudad para atacar a las fuerzas del Ejército sirio, que busca liberar la ciudad de los terrorista.

En este contexto, el responsable provincial hizo un llamado a las fuerzas de seguridad, para que informen a los civiles los pasos seguros por donde deben transitar, sin salirse de las rutas establecidas.

Al menos unas 1.500 personas abandonaron este sábado el barrio de Al Maamun, como medida de seguridad mientras las fuerzas iraquíes combaten a los terroristas en su tercera fase de ofensivas.

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