A 20 años de la firma de los acuerdos de paz que pusieron fin a 36 años del conflicto armado en Guatemala, el país centroamericano ve lejano los compromisos de desarrollo humano político y social que se plasmaron en los documentos.

Distintos sectores de la sociedad guatemalteca reclaman que no se hayan registrado avances en la implementación de dichos acuerdos, como la búsqueda de desaparecidos, defensa de los derechos de los pueblos indígenas, entre otras acciones.

Las deudas de la paz

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Guatemala es hoy en día uno de los países más violentos del mundo, a causa del crimen organizado, narcotráfico y pandillas. Las pandillas juveniles denominadas Las Maras han empujado a los jóvenes a la migración a los Estados Unidos (EE.UU.). 

En el año 2015 el país registró un total de 6 mil asesinatos, mientras que la pobreza se ubico en 59,3 por ciento, lo que representa a más de 9 millones de guatemaltecos. 

Nery Rodenas, Director Ejecutivo de la Oficina de Derechos Humanos del Arzobispado señaló al medio El Universal de México que "Guatemala no supera los problemas que originaron la guerra". 

"Son problemas estructurales que vienen desde la fundación del país, por la exclusión social y falta de acceso de vida digna, educación, salud, justicia. Es un país ingobernable". manifestó.

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Por su parte, el procurador de los Derechos Humanos de Guatemala, Jorge de León Duque, afirmó que "los Acuerdos de Paz son una verdadera agenda de desarrollo humano, la cual plantea una respuesta integral a los problemas del país", pero los gobiernos no han asegurado "el disfrute de los derechos humanos de la población". 

En un comunicado, De León Duque reconoció que en estas dos décadas se han observado "logros" en el sistema de Justicia, con la creación de institucionalidad y la lucha contra la impunidad, así como en materia de seguridad.

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A pesar de ello, "hay problemas que en el lapso de 20 años se han sumado a la deuda pendiente que ya existía al momento de la firma de los Acuerdos de Paz: se necesita garantizar la seguridad de la población y depurar las instituciones del Estado para que cumplan sus funciones fundamentales", argumentó el procurador.

Los Acuerdos de Paz para Guatemala lograron poner fin al conflicto que se prolongó de 1960 a 1996. A pesar de haber logrado conseguir el fin de las violencia política y sentar las bases de una transformación social y política, diversos analistas coinciden en que se fracasó en el diseño de  políticas públicas que permitieran reducir la pobreza así como la inseguridad social.