El cuerpo diplomático acreditado en Venezuela recibió este jueves información sobre el ataque terrorista ejecutado este martes contra dos sedes gubernamentales en el país desde un helicóptero secuestrado por un exfuncionario policial como parte de las acciones violentas emprendidas por la oposición. 

El presidente del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ), Maikel Moreno, y el ministro de Relaciones Exteriores, Samuel Moncada, expusieron a cerca de 70 funcionarios internacionales los hechos que no dejaron víctimas, pero que son considerados una acción dirigida a amedrentar a las autoridades venezolanas en medio de las acciones violentas que iniciaron en abril. 

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"Esas granadas estaban dirigidas a un grupo de la Guardia Nacional Bolivariana que se encontraba a en las adyacencias del TSJ y a escasos 30 metros aproximadamente estaba un centro de educación inicial donde estudian hijos de trabajadores del poder judicial. Estos artefactos pudieron estallar en esa institución que alberga niños en edades comprendidas entre seis meses y cinco años", detalló el funcionario.

Moreno aseguró que los diplomáticos se han dado cuenta con sus propios ojos de las denuncias que han realizado las autoridades del Gobierno sobre las acciones violentas que buscan desestabilizar la democracia en el país. 

Por su parte, el canciller insistió en el repudio el silencio de países, medios de comunicación y dirigentes opositores sobre el ataque terrorista. 

Moncada calificó la actuación mediática como "una atrocidad" e instó a los diplomáticos a llevar a la verdad sobre el ataque a sus países. 

"Si esto pasara en sus países no esperaríamos ni un minuto para condenarlo", aseveró.