Según datos del Ministerio de Empleo y Seguridad Social de España, ese país europeo culminó el año 2014 con 4,45 millones de desempleados, cifra que sigue siendo elevada a pesar de registrar en el mes de diciembre 253 mil 627 parados menos que en el mismo periodo de 2013.

Aunque este descenso del desempleo es el segundo consecutivo registrado al cierre de un año desde 2006, tras el anotado en 2013 cuando se redujo en 147 mil personas, la cifra proporcionada por el Ministerio de Empleo se muestra poco alentadora en relación a una pronta recuperación de los niveles de empleo.

A pesar del aumento de las cifras de ocupación, la calidad de los empleos sigue siendo precaria, debido a los bajos salarios que perciben los trabajadores españoles y a la temporalidad de duración de los mismos. Al respecto,  Pablo Iglesias, líder del partido político Podemos, indica que la situación del país es dramática debido a que el modelo de desarrollo del Presidente Rajoy “implica niveles de precariedad inéditos”.

España, la cuarta economía de la zona euro, enfrenta una crisis económica desde el año 2008. Hasta ahora no se ha podido recuperar de los altos niveles de  desempleo que se registraron desde el inicio de la crisis inmobiliaria de ese año.

El Gobierno de Mariano Rajoy enfrentará elecciones generales a finales de 2015 y los niveles de desempleo y de descontento con las políticas económicas y de empleo de su gobierno serán puntos álgidos en sus aspiraciones electorales.