La insurrección en la República Democrática del Congo ha provocado que casi cuatro millones de ciudadanos hayan tenido que desplazarse para alejarse de los conflictos activos y colocarse en calidad de refugiados, según reveló este martes Adrian Edwards portavoz de la Agencia de Naciones Unidas para los refugiados (Acnur) en una rueda de prensa. 

En el último trimestre más de 428.000 personas se han visto obligadas a abandonar su hogares, lo que ha generado un desplazamiento interno que no cesará a corto plazo por los conflictos internos.

"Con la acción generalizada de milicias, con la violencia y disturbios avivados por conflictos étnicos y políticos ocurriendo en varias áreas, el riesgo de más desplazamientos es alto. El desafío de entregar ayuda a las personas es cada vez más acuciante”, señaló Edwards. 

La provincia de Tangayika es escenario de violaciones, torturas, asesinatos, extorsiones y saqueos perpetrados por milicianos activos y por la violencia desmedida entre los Twa y los Luba. 

En las jurisdicciones norteñas de Kivu del Norte y Kivu del Sur, donde hay 1.545.000 ciudadanos desplazados internos congoleños a los que se le suman 30.000 refugiados Burundeses alojados en varios campamentos. 

La segunda opción que les queda a los oriundos de Kivu del Norte es emigrar a Uganda donde ya hay 236.500 ciudadanos, mientras que sus vecinos del sur huyen a Tanzania que le ha servido de resguardo a 76.890 personas. 

Angola también ha servido de morada para 27.555  habitantes de la región de Kasai donde hay 762.000 personas desplazadas por la violencia. 

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