Todo está preparado para que el Gobierno de Cuba y su pueblo reciban este domingo en horas de la tarde al presidente de Estados Unidos (EE.UU.), Barack Obama, quien realizará una visita oficial a la isla, la primera que hace un mandatario norteamericano después de más de 80 años.

De acuerdo con lo informado por el Ministerio de Relaciones Exteriores de Cuba, la visita oficial se extenderá hasta el 22 de marzo y está enmarcada en el proceso de normalización de las relaciones bilaterales que mantienen ambas naciones.

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La agenda prevé que Obama dará un recorrido este domingo por La Habana Vieja y visitará la Catedral de La Habana, en la capital del país.

También, se espera que el lunes el jefe de Estado norteamericano participe en el ceremonial diplomático protocolar.

Asimismo, sostendrá conversaciones oficiales con el presidente cubano Raúl Castro y el martes 22 de marzo pronunciará un discurso en el Gran Teatro Alicia Alonso ante una amplia representación de la sociedad civil cubana.

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La visita de Obama sella el cambio de política de la nación estadounidense iniciado el 17 de diciembre de 2014 y que además se ve influida por la fortaleza de la diplomacia cubana, ya que Cuba ha reiterado su plena disposición a mantener un diálogo respetuoso con el Gobierno de los Estados Unidos y a desarrollar relaciones de convivencia civilizada.

La iniciativa de Obama de acercarse a Cuba representa un avance en el restablecimiento de las relaciones diplomáticas; no obstante, aún no se puede hablar de unas relaciones diplomáticas normales entre las dos naciones, que se supedita a la devolución de la Base Naval de Guantánamo, ocupada ilegalmente y también al cese del bloqueo económico, financiero y comercial.

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Obama “será bienvenido por el Gobierno de Cuba y su pueblo con la hospitalidad que los distingue y será tratado con toda consideración y respeto”, pero “nadie puede pretender que para ello, tengamos que renunciar a uno solo de sus principios, ceder un ápice en su defensa”, ha expresado el Gobierno a través de un editorial publicado por Granma.

El evento coincide con la fecha propuesta para la firma del Cese bilateral al fuego entre las FARC-EP y el gobierno colombiano.

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Expertos afirman que Obama impulsa un cambio táctico en las relaciones con América Latina (y en especial con Cuba, Brasil, Venezuela y Bolivia) que intenta poner u ocultar en un segundo plano los planes violentos (con el apoyo de factores internos en cada uno de los países y de la mediática internacional) y privilegia la diplomacia, el mercado y las finanzas (incluye la asfixia económica), con menos impacto en la opinión pública mundial.