La operación antiterrorismo que realizan de manera conjunta la Fuerza Aérea rusa y el Ejército sirio continúa su escalada en los diferentes territorios del país asiático, y han logrado que los extremistas pierdan capacidades durante las últimas semanas.

La televisora oficial de Siria detalló que la milicia logró acabar con dos semanas de asedio en los barrios de Alepo y expulsó al autodenominado Estado Islámico (EI) de la única carretera que une esta ciudad con el resto del país.

"Nuestras unidades del ejército retomaron el control total de la carretera Alepo-Janaser-Ithriya-Salmiyé después de haber eliminado a un gran número de terroristas de Daesh (acrónimo árabe del EI) y será reabierta (el jueves) por la mañana", informó el medio local.

Tras la toma de esta carretera por parte de los extremistas, cerca de medio millón de habitantes de los barrios de Alepo estaban aislados y los precios de los productos de primera necesidad habían incrementado.

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Otras operaciones

La aviación militar conjunta sirio-rusa atacó posiciones del EI en los poblados de al-Yafra y al-Mreiyia, y bombardeó un campamento rebelde en Huaiyat al-Mreiyia, donde causaron la muerte de 29 extremistas armados.

Asimismo, las unidades de infantería del Ejército destruyeron un puesto de telecomunicaciones ubicado en al-Hissan y mataron a todos los terroristas que allí se encontraban. En el lugar, también se inhabilitaron siete vehículos artillados.

Otra localidad en la que la ofensiva logró avanzar fue en Daraa, a 103 kilómetros al sur de la capital siria, donde fue eliminada una banda terrorista que se mantenía atrincherada en las inmediaciones de una escuela.

Como una medida de respuesta a estas acciones combativas, los grupos radicales han incrementado sus ataques en las poblaciones y han causado daños severos en vehículos y viviendas.

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