Los conservadores católicos del partido euroescéptico Derecho y Justicia (PiS), que lidera Jaroslaw Kaczynski, lograron la mayoría absoluta en las elecciones legislativas de este domingo en Polonia, según proyecciones de tres canales de televisión sobre sondeos a pie de urna.

Esas proyecciones dan a Derecho y Justicia 39,1 por ciento de los votos, lo que representa 242 diputados sobre 460 bancas.

Los liberales centristas de Plataforma Cívica (PO) de la primera ministra saliente Ewa Kopacz obtuvieron 23,4 por ciento de los sufragios, es decir 133 puestos.

El movimiento antisistema del rockero Pawel Kukiz fue tercero con 44 escaños. Mientras, el partido Nowoczesna (Moderno) del neoliberal Ryszard Kapuściński obtuvo 22 bancos y el partido paisano PSL, aliado de los liberales salientes, 18 legisladores.

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En su primera reacción, Kaczynski subrayó que esta es la primera vez en la historia de Polonia que un solo partido va a gobernar al país, y agregó que se le tiene que dar la mano a los partidos que quieran colaborar con el PiS.

Por su parte, la primera ministra saliente declaró que su partido no había desaprovechado los ocho últimos años en el gobierno.

"Polonia es un país que progresa desde el punto de vista económico, y con cifras de desempleo de un solo dígito. En esta situación hemos dejado Polonia a quienes ganaron las elecciones de hoy", indicó la ministra Kopacz.

En cuanto a la izquierda, representada por dos formaciones diferentes, quedó eliminada por primera vez desde 1989 del futuro parlamento al no haber alcanzado la cantidad mínimo para estar representada.

Polonia es un país estratégico para los planes de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) y Estados Unidos, a fin de cercar a Rusia.