La presidenta de la organización argentina Madres de Plaza de Mayo, Hebe de Bonafini, cuestionó este jueves al juez federal Marcelo Martínez de Giorgiy y al sistema judicial del país.

Bonafini había sido citada a declarar en los tribunales de Retiro por la causa de presunto desvío de fondos del programa de viviendas "Sueños Compartidos", que ejecutó esa organización de derechos humanos mientras estuvo al frente Sergio Schoklender.

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La activista no acudió a la citación, sin embargo, envió con su abogado una condunte carta en la que responde a la acción judicial, mismo texto que posteriormente fue leído públicamente, por la misma Bonafini, desde la Plaza de Mayo.

"Desde el año 1977, más precisamente el día 8 de Febrero de ese año, vengo padeciendo las agresiones de la mal llamada justicia, implementada por jueces de la Nación", reza el escrito.

Bonafini relata que desde esa fecha empezó su calvario, debido a que hizo 168 presentaciones por su hijo Jorge, y posteriormente también tuvo que reclamar por su otro hijo, Raúl, quien fue desaparecido en diciembre de ese mismo año.

Respecto a esto, denuncia que en su constante peregrinación por los juzgados, siempre padeció injusticias y agresiones.

En el texto, la activista también recuerda que su nuera, María Elena, también desapareció en 1978 y que en el año 2005 su hija, María Alejandra, fue torturada casi hasta la muerte.

"Siempre la misma ignominia, la misma indiferencia, yo sentía como la denominada justicia era cómplice de los asesinos militares y marinos. Una justicia sin solidaridad, sin sentir por los otros, sin sufrir por ellos", prosigue la carta.

Finalmente, Hebe de Bonafini asegura que las Madres de Plaza de Mayo siempre van a defender los valores de solidaridad social y extenderán sus manos a los vulnerados, en este tiempo y en los que vendrán.

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