El presidente de Siria, Bashar al Assad, indicó este jueves que los gobiernos europeos siempre han estado siguiendo los pasos de Estados Unidos y no toman decisiones propias en el escenario político.

Denuncio que “desde el inicio de la invasión de Irak en 2003, toda Europa está ausente del mapa político. Los Gobiernos europeos han seguido a EE.UU. No se atreven a seguir una vía política independiente”.

El mandatario ha marcado una gran diferencia entre los pueblos y los Gobiernos europeos, destacando que los pueblos de Europa no son ni han sido enemigos del pueblo y del Estado sirio.

Al Assad reprochó que los medios occidentales intentan mostrar que el Gobierno sirio “está matando al pueblo y bombardeando a las escuelas y hospitales”. Aclaró que "es absolutamente falso que la política de nuestro Gobierno sea destruir hospitales o asesinar a civiles”.

Agregó que “desde el comienzo del conflicto, Siria está haciendo frente a una campaña de mentiras" de los medios occidentales.

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“¿Cómo podría seguir siendo presidente después de seis años, si fuera verdad lo que dice la prensa occidental?”, cuestionó el mandatario.

"Si no contase con el apoyo del pueblo, no estaría ahora aquí”, aseveró.

Al Assad precisó que él y otros miembros del Gabinete sirio tienen gran apoyo popular. "Todo ello pone en tela de juicio las mentiras que se difunden sobre la realidad de Alepo”, criticó.

En contexto

Siria está sumida desde hace más de cinco años en una guerra civil donde las tropas gubernamentales se enfrentan a grupos mercenarios de la oposición y organizaciones terroristas como Daesh y Fatah al Sham.

El 9 de septiembre Rusia y EE.UU. acordaron en Ginebra (Suiza) un compromiso para reducir la violencia en Siria y garantizar el acceso de ayuda humanitaria. A pesar de que el Gobierno de Bashar al Assad aprobó el anuncio sobre el alto el fuego a partir del 12 de septiembre, las fuerzas de oposición infringieron este acuerdo 23 veces, casi todas en Alepo y Damasco.

El pasado 03 de octubre al menos 22 personas fallecieron y 33 resultaron heridas en la ciudad siria de Hasaka.