Este domingo los venezolanos acudirán a las urnas para elegir a los 167 diputados de la Asamblea Nacional. Estas son algunas de las claves bajo las cuales se desarrollará la contienda:

1.- Manda el contexto económico. El desabastecimiento y la inflación son las principales preocupaciones de los votantes. La supuesta ausencia de democracia es una construcción mediática para consumo externo que apenas impacta en el país. Los venezolanos consideran que el sistema político que aprobaron en 1999 mediante referéndum garantiza de forma razonable sus derechos y libertades. Lo mismo cabe decir de los supuestos presos políticos. El ruido internacional es inversamente proporcional a la indiferencia de un pueblo que no admite el golpismo.

2.- La oposición lleva un año buscando un estallido social que no se ha producido. Sus llamamientos a salir a la calle no han tenido respuesta. Aunque el descontento es patente, los venezolanos no parecen estar dispuestos a seguir la bandera de la agitación que propone la derecha. El Gobierno de Nicolás Maduro ha hecho un notable esfuerzo por garantizar los bienes básicos a precios justos, defender el poder adquisitivo mediante aumentos salariales o mantener la inversión social en sanidad, educación, pensiones o vivienda pública. Son medidas alternativas a la ortodoxia neoliberal que apenas tienen eco en los medios internacionales. Se publica la foto de un supermercado vacío pero no la de un operativo estatal de suministro de alimentos a un costo razonable.

3.- El pueblo demanda un cambio, pero está por ver si es hacia una propuesta ultracapitalista. En Venezuela hay un consenso social sobre lo perjudiciales que fueron las recetas neoliberales en los años 80 y 90. Nadie quiere regresar al pasado. Según la Encuesta Nacional de Juventud de 2013, el 60% de los venezolanos de entre 15 y 29 años cree que el socialismo es el mejor sistema económico, frente a un 21% que se decanta por el capitalismo. Da la impresión de que los venezolanos no quieren otro sistema, sino más sistema. El cambio reclamado pasaría por profundizar e intensificar las políticas públicas implementadas en estos años con las que Venezuela ha logrado los mayores avances sociales de su historia. Ante estas evidencias demoscópicas, la derecha hace auténticos malabarismos, con escaso éxito, para ocultar su verdadera agenda y travestirse de una suerte de socialdemocracia descafeinada.

4.- La oposición no se conformará con los resultados, sean cuales sean. Si pierde, todo apunta a que denunciará un fraude. Ya ha construido mediáticamente el escenario de la imposibilidad de una derrota. Por tanto, la única explicación a un resultado adverso sería la manipulación de las elecciones Si gana, no se conformará con la mayoría en la Asamblea, cuya composición es, al fin y al cabo, lo que se dirime este domingo. Se lanzará con todos los medios a su alcance a derribar el Gobierno de Maduro, su verdadero objetivo.

El autor es un periodista español residente en Venezuela