El Papa Francisco ha renovado los llamados a un alto el fuego inmediato en Gaza y la liberación de todos los cautivos israelíes en un discurso centrado en la paz que conmemora el Domingo de Pascua.

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"No permitamos que las hostilidades en curso continúen afectando gravemente a la población civil, ya de por sí extenuada, y principalmente a los niños. Cuánto sufrimiento vemos en sus ojos. Con su mirada nos preguntan: ¿por qué? ¿Por qué tanta muerte? ¿Por qué tanta destrucción?", declaró durante su bendición "Urbi et Orbi".

Francisco presidió la misa en una repleta Plaza de San Pedro y luego pronunció su bendición y mensaje “Urbi et Orbi” (a la ciudad y el mundo) desde el balcón central de la Basílica de San Pedro.

El jefe de la Iglesia católica presidió la misa del Domingo de Resurrección en la plaza de San Pedro ante más de 30.000 personas.

"Hago un llamamiento una vez más para que se garantice el acceso a la ayuda humanitaria a Gaza, y pido una vez más la pronta liberación de los rehenes capturados el pasado 7 de octubre y un alto el fuego inmediato en la Franja", dijo.

"No permitamos que las hostilidades actuales sigan teniendo graves repercusiones sobre la población civil, ahora al límite de su resistencia, y sobre todo sobre los niños", dijo en un discurso que también abordó la difícil situación de los haitianos. los rohingya y las víctimas de la trata de personas.

“Cuánto sufrimiento vemos en los ojos de los niños, los niños se han olvidado de sonreír en esas zonas de guerra. Con la mirada los niños nos preguntan: ¿Por qué? ¿Por qué toda esta muerte? ¿Por qué toda esta destrucción? La guerra es siempre un absurdo y una derrota”, afirmó.