Turquía amenaza con nueva ofensiva militar en la frontera siria
Erdogan prometió limpiar la frontera "de los terroristas de las Unidades de Protección Popular" si Rusia no cumple con lo pactado en el Acuerdo de Sochi.
El presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, amenazó este sábado con retomar la ofensiva militar en la frontera norte de Siria si las Fuerzas Democráticas Sirias (FDS) no cumplen con los términos de la "zona de seguridad" pactada el pasado martes entre Turquía y Rusia.
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"Si los terroristas no se retiran al término de las 150 horas -a partir de las 09H00 GMT del 23 de octubre- tomaremos el control y los expulsaremos" dijo Erdogan en un discurso televisado, refiriéndose a las milicias kurdas de las Unidades de Protección Popular (YPG), que lideran las FDS.
El mandatario turco prometió limpiar “la zona fronteriza de los terroristas de las YPG si Rusia no cumple con sus obligaciones conforme al Acuerdo de Sochi", pacto que estipula que la Policía Militar rusa y la guardia fronteriza siria entren en el lado sirio de la frontera, fuera de la zona de la Operación Manantial de Paz, para facilitar la retirada de los elementos de las YPG y sus armas en una zona de 30 kilómetros.
Türkiye-Rusya Federasyonu Arasında Mutabakat Muhtırası pic.twitter.com/juNQuGI3Cx
— T.C. Cumhurbaşkanlığı (@tcbestepe) October 22, 2019
Después de concluir ese primer momento que expira el martes a las 15H00 GMT, el trato prevé que inicien patrullas conjuntas entre Moscú y Ankara al este y oeste del área de Manantial de Paz, con una profundidad de diez kilómetros, exceptuando Qamishli.
Asimismo, Moscú y Ankara acordaron crear un organismo para verificar la aplicación del memorando, trabajar "para lograr una solución política" al conflicto en Siria y apoyar los trabajos del comité constitucional.
Sin embargo, el comandante de las FDS, Mazlum Kobani, anunció el viernes que el grupo "no ha aceptado" la totalidad del acuerdo de Turquía y Rusia, pues después de la consulta y tienen "reservas" respecto al contenido.
Erdogan, cuya intención es reubicar en una zona de seguridad en el norte de Siria a los aproximadamente 3.6 millones de refugiados de ese país acogidos en Turquía, afirmó esperar que el mundo respete las preocupaciones de seguridad turcas y apoye su proyecto.
En este sentido amenazó a la Unión Europea, asegurando que "si los proyectos que hemos desarrollado para la vuelta de los refugiados sirios a su país no reciben apoyo, no tendremos más alternativa que abrir nuestras fronteras".
Turquía mantiene el control en otra región del noreste, de 120 km de largo, donde tiene a su ejército desplegado tras conquistarla con una ofensiva lanzada el 9 de octubre contra las YPG, a las que consideran un grupo terrorista.
Por otra parte, el canciller ruso, Serguéi Lavrov, y el secretario de Estado de Estados Unidos, Mike Pompeo, en una conversación telefónica que tuvo lugar este sábado, discutieron la situación en Siria, informó el Ministerio de Asuntos Exteriores ruso.
"El 26 de octubre, por iniciativa de Estados Unidos, tuvo lugar una conversación telefónica entre el canciller ruso, Serguéi Lavrov, y el secretario de Estado de EE,UU,, Mike Pompeo; se discutió la situación en Siria", dice el comunicado.
Se señala que "Rusia subrayó la necesidad de abstenerse de adoptar medidas que socaven la soberanía y la integridad territorial de este país".
El ente agregó que durante la conversación telefónica se discutieron algunos temas de las relaciones bilaterales.
El martes, Rusia y Turquía acordaron el envío de unidades de la policía militar rusa y soldados sirios a la frontera turco-siria a partir del 23 de octubre para facilitar el traslado de las facciones kurdas a unos 30 kilómetros de la línea fronteriza.
El repliegue de las milicias kurdas debe completarse dentro de 150 horas posteriores al mediodía del 23 de octubre.