Roskomnadzor, el regulador ruso de comunicaciones, le dio un plazo de nueve meses a Facebook y Twitter para que ubique los datos de sus ciudadanos y estos sean almacenados en servidores ubicados territorialmente en Rusia por razones de seguridad.

Se realizó un juicio y las empresas fueron multadas, explicó el regulador Alexandr Zhárov, quien agregó que se ha dado tiempo a las compañías para que cumplan con la legislación de Rusia.

Esta demanda de Rusia tiene antecedentes en 2018, cuando Facebook respondió que los datos de sus seguidores no se ubican de acuerdo a criterios geográficos.

Las filtraciones de Facebook fueron uno de los escándalos más grandes de 2018, cuando esta empresa reconoció que expuso los datos de al menos 120 millones de sus usuarios.

Con los datos filtrados, la empresa Cambridge Analytica influyó en las campañas políticas de Donald Trump y del brexit.