El exprimer ministro de Pakistán, Nawaz Sharif, retornó a su nación este sábado, luego de vivir desde 2019 en un exilio autoimpuesto en Londres, capital de Reino Unido, con el propósito de ganar apoyo en los próximos comicios al Parlamento planificadas para el próximo mes de enero de 2024.

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Procedente de Dubai, Sharif tiene previsto encabezar un mitin en Lahore, su ciudad natal ubicada al este de Pakistán, donde se espera la presencia de unos 194 miembros de su partido Liga Musulmana de Pakistán-Nawaz (PML-N).

Antes de abordar el avión que lo trasladó a su país de origen, Sharif declaró a la prensa que Pakistán está “totalmente preparado para las elecciones”. “Nuestro país, que debería haber estado en la cima de la prosperidad, realmente retrocedió”, subrayó.

En 2017, el expremier fue condenado a 14 años de prisión, acusado de corrupción, por lo que fue depuesto de sus obligaciones y, en consecuencia, impedido de participar en la política.

Aunque su condena continúa vigente, el pasado jueves la Alta Corte de Islamabad dictó una medida que le otorgaba la libertad bajo fianza, por lo que podría regresar a su país el fin de semana y prohibía su arresto hasta el martes, cuando está prevista su comparecencia ante el tribunal.

El retorno de Sharif, de 73 años, se produce en un momento en que Pakistán atraviesa por una de sus mayores crisis económicas, con una inflación que en septiembre alcanzó el 31 por ciento interanual que ha elevado el costo de la vida en ese país asiático.

De acuerdo con los analistas, este fenómeno se exacerbó durante los 16 meses de Gobierno de coalición liderado por el hermano menor del expremier, Shehbaz Sharif, tras la destitución de Imran Khan en 2022.

En este sentido, Sharif se enfrenta al desafío de recuperar la confianza de los votantes, en un contexto en el que Khan, a pesar de estar encarcelado, luego de que superara una moción de censura.