Con la intención de conocer un poco más de la cultura Tiahuanaco, el Museo Nacional de Arqueología de Bolivia inició un proyecto de reconstrucción de cráneos de esta cultura, para conocer cómo eran los rostros de quienes habitaron la zona andina boliviana hace más de 3.000 años.

El Ministerio de Culturas y Turismo indicó en un comunicado que en ese centro se conservan más de 150 cráneos tiahuanacotas con deformación, muchos de los cuales serán reconstruidos de acuerdo a un plan de "largo y corto alcance".

Con la técnica aplicada por los expertos, la reconstrucción de cada cráneo toma aproximadamente dos meses.

Según el informe del antropólogo forense Luis Castedo Zapata, quien lidera el equipo encargado de la iniciativa, se inició la reconstrucción de tres cráneos, uno perteneciente a un niño de dos años y los restantes de adultos.

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"En base a la utilización de técnicas avanzadas y un trabajo manual detallado, ya se obtuvieron los rasgos faciales de los tres cráneos deformados. Lo que solo resta es el toque final del color de la piel, con lo que estará listo para su exhibición", dijo Castedo.

Según investigadores bolivianos, Tiahuanaco nació como aldea alrededor de 1.580 A.C. y creció hasta ser un estado imperial en el 724 D.C., aunque declinó cerca del 1.187 de nuestra era.

La ciudad está situada a unos 71 kilómetros de La Paz. Fue la capital del antiguo imperio prehispánico del mismo nombre y del que hoy quedan imponentes monumentos líticos como el templo de Kalasasaya, el Templete Semisubterráneo, esculturas de sus jerarcas, la Puerta del Sol y restos de palacios militares y civiles.