Los rebeldes hutíes que gobiernan gran parte de Yemen afirmaron que continuarán los ataques a las embarcaciones en el mar Rojo en apoyo a la causa palestina a pesar del anuncio de la coalición militar liderada por Estados Unidos destinada a combatir al movimiento chiita.

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"La coalición formada por Estados Unidos es para proteger a Israel y militarizar el mar sin ninguna justificación, y no impedirá de que  Yemen continúe con sus operaciones legítimas en apoyo a Gaza", afirmó el portavoz de los rebeldes, Mohamed Abdulsalam.

En este sentido, el vocero apuntó que, si Washington apoya a Israel con una alianza, los países de la región tienen “plena legitimidad” para respaldar al pueblo palestino, entretanto, destacó que Yemen “se ha encargado de defender el derecho palestino”.

A su vez, Abdulsalam indicó que las operaciones navales tienen como objetivo enfrentar el genocidio israelí en la Franja de Gaza mientras aseguró que no constituyen una demostración de fuerza.

Por su parte, el alto funcionario hutí, Mohammed al-Bukhaiti, afirmó esta jornada que incluso su Estados Unidos “logra movilizar al mundo entero, nuestras operaciones militares no se detendrán”.

En consonancia, destacó que los hutíes cesarían las hostilidades en caso de que finalicen los crímenes israelíes en Gaza y se permita la entrada de alimentos, medicinas y combustible a la población.

En cambio, el Pentágono anunció a través de un comunicado una coalición de diez países para enfrentar los ataques de los hutíes. La misma está conformada por el Reino Unido, Francia, España, Italia, Países Bajos, Canadá, Noruega, Baréin y Seychelles.

De acuerdo con medios internacionales, la operación internacional, denominada “Guardián de la Prosperidad”, actuará subordinada a la multilateral Fuerzas Marítimas Combinadas (CFM), la cual es encabezada por el vicealmirante de la Marina estadounidense Brad Cooper.