El presidente peruano, Pedro Castillo, llamó el jueves a cesar la confrontación política y llamó a la unidad, tras un nuevo intento de moción para destruirlo en el Parlamento, impulsado por la derecha peruana.

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“Estos son tiempos que exigen unidad y no división. Cooperación y no enfrentamiento. Solo así podremos alcanzar las grandes metas que todos compartimos”, expresó el jefe de Estado.

Sobre las preocupaciones respecto a la estabilidad política, el mandatario señaló que la gobernabilidad se construye entre todos, no solo de un lado, y “poniendo por delante los intereses del país, sin obstáculos, sin cortapisas, sin infundios y sin romper el equilibrio de poderes”.

La primera ministra de Perú, Mirtha Vásquez, afirmó que el pedido de destitución a Pedro Castillo propuesta por la derecha peruana puede "representar atentados contra la voluntad popular y por ende contra la democracia" de su país.

Vásquez envió un oficio a la presidenta del Congreso, María del Carmen Alva, expresándole su preocupación por la moción de destitución propuesta por la congresista Patricia Chirinos, del partido derechista Avanza País.

En el texto, la jefa del gabinete peruano, le indicó a María del Carmen Alva que esperaría que su oficina se distancie de este tipo de ataques contra la gobernabilidad.

Los legisladores de izquierda afirmaron que el pedido forma parte de un "plan golpista", mientras que representantes de agrupaciones de derecha se mostraron de acuerdo con la iniciativa.

Más allá de estas posiciones individuales, la mayoría de bancadas manifestó su sorpresa por la propuesta y coincidió en que una medida de este tipo solo podría generar más inestabilidad política y económica en su país.