El presidente de Perú, Pedro Castillo, afirmó este viernes que limpiarán el desastre causado por el derrame de petróleo en Ventanilla, y sancionarán a la empresa responsable.

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Durante la colocación de la primera piedra en el hospital de Huari en la región Áncash, el mandatario aseveró que sancionará a todas aquellas compañías que ocasionan daños medioambientales y no se hacen responsables de ello.

Castillo agregó que no tiene miedo alguno pues no le debe nada a nadie, y ninguna compañía financió su campaña presidencial.

El presidente subrayó que el ejecutivo trabaja y trabajará con transparencia; e instó a las demás autoridades a hacer lo mismo siempre en favor del pueblo.

Castillo alerta sobre uso en su contra del derrame de crudo

El Ejecutivo peruano alertó que sus enemigos políticos están usando el derrame de más de 6.000 barriles de crudo en Ventanilla en su contra para pedir su destitución.

Esto se debe a que sectores de la derecha extremista peruana pueden alegar una supuesta negligencia gubernamental en el derrame para exigir la destitución del mandatario.

No es primera vez que la ultraderecha busca destituir al presidente Castillo. A finales del 2021, el dirigente se enfrentó a un intento semejante en el que se alegaba que era moralmente incapaz para portar la banda presidencial. 

El pasado 15 de enero, en la refinería La Pampilla administrada por la compañía Repsol situada en el distrito de Ventanilla acaeció el derrame de más de seis millares de barriles de crudo que afectó cerca de 155 kilómetros cuadrados.

Varios funcionarios de Repsol se mantienen bajo investigación y las autoridades peruanas evalúan aplicar multas ante el vencimiento de plazos para responder por el desastre provocado.