El presidente de Francia, Emmanuel Macron, llegó este jueves a Argel para una visita oficial de tres días al país norafricano con el objetivo de reconstruir una relación bilateral que ha sufrido distanciamientos en los últimos meses.

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Macron encabeza una delegación de más de 90 personas y fue recibido al descender del avión por su homólogo argelino, Abdelmadjid Tebboune, ante los himnos nacionales de los dos países interpretados por una banda militar.

Los dos presidentes se dirigieron luego al Monument des Martyrs, un lugar de la memoria argelina de la guerra de independencia (1954-1962) contra Francia.

A esto le seguirá un encuentro cara a cara en la Presidencia y una cena en el Palacio del Pueblo en honor a Emmanuel Macron, en la que participará toda su delegación.

Los dos presidentes abordarán, en particular, la situación en Malí, lugar del cual acaba de retirarse el Ejército francés, bajo acusaciones del Gobierno local.

Argelia juega un papel central en la región debido a sus miles de kilómetros de fronteras con Malí, Níger y Libia. Al mismo tiempo, se ha negado a sumarse a la andanada de sanciones antirrusas.

El tema de las visas otorgadas por Francia también estará en el centro de las discusiones, ya que Emmanuel Macron decidió en 2021 reducirlas a la mitad con el pretexto de que Argel no quiere readmitir a ciudadanos llamados indeseables por Francia.

La visita coincide con el 60 aniversario del fin de la guerra y la proclamación de la independencia de Argelia en 1962.

Esta es la segunda vez que Emmanuel Macron visita Argelia como presidente, después de una primera visita en diciembre de 2017, al comienzo de su primer mandato de cinco años.