El papa Francisco pidió este jueves al mundo "no permanecer indiferente" ante hechos como el naufragio de un barco con migrantes cerca de la isla de Lampedusa, en Italia, en el que murieron al menos 41 personas, entre ellas tres menores de edad.

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"He recibido con dolor la noticia de un nuevo naufragio de migrantes en el mar Mediterráneo. No permanezcamos indiferentes ante estas tragedias y recemos por las víctimas y sus familiares", publicó el pontífice en su cuenta de Twitter.

Los cuatro supervivientes, tres hombres y una mujer originarios de Costa de Marfil y Guinea Conakry, fueron rescatados por una patrullera de la Guardia Costera.

Estos llegaron en estado de shock y fueron escuchados por la fiscalía de la ciudad de Agrigento, que ha abierto una investigación por el incidente.

A raíz del suceso, la ONU pidió "mecanismos coordinados de búsqueda y rescate y vías seguras y legales para la migración y el asilo", tras recordar que "hace apenas unos días una madre y un niño ya habían perdido la vida" frente a Lampedusa.

Asimismo, el pasado sábado, otros dos naufragios frente a dicha isla dejaron al menos 34 personas fallecidas. De ellos solo se pudieron rescatar tres cadáveres en medio de un fuerte temporal.

Más de 1.800 personas han perdido la vida en lo que va de año en la travesía del norte de África a Europa que sigue estando entre las más transitadas y peligrosas a nivel mundial. En el centro de acogida de Lampedusa, con capacidad para 300 personas, se hacinan actualmente más de 1.500.