Volker Türk, alto comisionado de la ONU para los derechos humanos, dijo estar alarmado por la situación que atraviesan los que están luchando contra la corrupción en Guatemala. 

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El funcionario alegó que los miembros del nuevo gobierno están siendo intimidados y sufren una persecución por los corruptos de la nación centroamericana. 

“La intimidación, el hostigamiento, el procesamiento y la persecución de quienes luchan por la rendición de cuentas por violaciones de derechos humanos y que trabajan en casos de corrupción, son reprensibles y deben cesar”, señaló en una declaración emitida por su oficina en Ginebra.

Aseguró que se reflejó un aumento de la criminalización de los operadores de justicia en el último año en Guatemala, lo que a su juicio va contra la independencia del Poder Judicial y del Estado de derecho del país. 

Dijo que particularmente le llama la atención el caso de Virginia Laparra, exfiscal anticorrupción del Ministerio Público, a la que se le brindó el beneficio de arresto domiciliario. 

“Me preocupa que el proceso penal en su contra no haya cumplido con las garantías del debido proceso y que, en consecuencia, su detención durante cerca de dos años haya sido arbitraria. Ella debería ser liberada incondicionalmente”, exhortó.

Desde Ginebra, Türk instó a que se tomen medidas para garantizar la independencia, sin intromisiones, del sistema de justicia de Guatemala.

Es preciso destacar que este alto funcionario de la ONU se ha quejado por el proceso de transición en el poder del país a causa de la lucha que hay entre los entes que componen el Estado de Guatemala.