El secretario general de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), António Guterres, alertó este martes que el mundo puede enfrentar una catástrofe alimentaria importante, en un contexto donde existe una crisis en el mercado de fertilizantes.

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En la cumbre del G20 desarrollada en Bali, Indonesia, el funcionario llamó a la integración y la respuesta coordinada para enfrentar la falta de recursos que puede llevar a una crisis a nivel mundial.

"Estamos en camino a una catástrofe alimentaria furiosa, y el mundo parece ser indiferente. La gente en cinco lugares distintos se enfrenta a la hambruna. En la Cumbre del G20 advertí que sin una acción coordinada, la crisis de asequibilidad de este año puede convertirse en la escasez mundial de alimentos del próximo año", expresó el funcionario.

Guterres resaltó que la inestabilidad y la poca financiación para los países en vías del desarrollo y el cambio climático que causa sequías y lluvias torrenciales, así como altera los ciclos de pesca y cosecha de alimentos.

Asimismo, habló de la influencia del aumento de precios de la energía, resultado en parte por las sanciones de Europa y Estados Unidos contra Rusia.

El secretario general llamó a invertir en energía renovable mucho más que en combustibles fósiles y añadió que, si hace unas décadas hubiese pasado esto, ahora mismo el mundo no estuviera en crisis energética.

Guterres recalcó que el mundo tiene que apelar a la unidad, solidaridad y el multilateralismo para encontrar las soluciones a la crisis alimentaria y energética y evitar que estas se acentúen y tomen escalas mayores.