El Estado Mayor del Ejército de Níger anunció este jueves su adhesión a las Fuerzas de Defensa y Seguridad que encabezaron este miércoles el golpe de Estado contra el presidente electo de ese país africano, Mohamed Bazoum.

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En un comunicado, firmado por el general de división, Abdou Sidikou Issa, el Ejército explica que su decisión se dicta por "el afán de preservar la integridad física del presidente de la República y de su familia, y evitar una confrontación mortal entre las diferentes fuerzas que (...) podría provocar un baño de sangre y comprometer la seguridad de la población".

Miembros de la Guardia Presidencial detuvieron a Bazoum dentro de su palacio en la capital, Niamey, la madrugada del miércoles.

En declaraciones difundidas posteriormente por la televisión nacional, el coronel mayor, Amadou Abdramane, vocero de un grupo autodenominado Consejo Nacional para la Salvaguardia del País, dijo que “las fuerzas de defensa y de seguridad… han decidido poner fin al régimen que ustedes conocen”.

“Esto sigue al continuo deterioro de la situación de seguridad, a la mala gestión social y económica”, agregó.

El grupo golpista anunció el cierre de las fronteras del país y el establecimiento de un toque de queda, así como la suspensión de todas las instituciones.

Asimismo, este jueves, luego de que el Ejército declarara su lealtad, Abdramane informó que todas las actividades de los partidos políticos en Níger quedaban suspendidas hasta nuevo aviso.

El golpe, el quinto exitoso en África Occidental desde 2020, fue condenado por el secretario general de las Naciones Unidas, Antonio Guterres, quien instó el jueves a los captores de Bazoum a liberarlo “inmediata e incondicionalmente”.