Al menos 10 personas han muerto tras el incendio Carr que ha afectado el estado de California, Estados Unidos, en las últimas semanas y provocó la evacuación de más de 20.000 personas. 

La nueva víctima fue registrada en el condado occidental de Shasta y Trinity, donde han fallecido siete personas (incluyendo dos bomberos), tras la ola de incendios que han terminado con 7.300 hectáreas en solo cinco días.

Las otras dos personas perdieron la vida en el siniestro del Parque Nacional Yosemitet, el cual se encuentra clausurado por medidas de seguridad.

Hasta ahora, Carr ha causado graves daños materiales e infraestructurales en zonas comerciales, residenciales y reservas naturales de California, entre ellos, 600 estructuras, 1.600 edificios y más de 119 viviendas.

Por su parte, el Servicio Climático Nacional advirtió que las altas temperaturas persistirán con vientos de 56 kilómetros por hora,  así como temperaturas por encima de los 32 grados. 

"Una combinación de fuertes vientos, baja humedad relativa y temperaturas cálidas puede contribuir al comportamiento extremo del incendio", indicaron las autoridades.

Asimismo, el gobernador de la entidad, Jerry Brown, afirmó que los condados de Orange y Riverside se mantienen en alerta ante el riesgo de incendios.

La ignición ha calcinado 73.400 hectáreas en todo el estado, con más de 15 focos de llamas simultaneas en un día, convirtiéndose en la catástrofe más grande en la historia de California en los últimos años.

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