Ante la aglomeración de miles de migrantes en el puente que divide las fronteras de México y Guatemala, las autoridades mexicanas permitieron el paso a las decenas de personas varadas en el lugar, la mayoría procedentes de Honduras, que buscan atravesar México con destino a Estados Unidos.

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Desde el viernes, cuando ya más de un millar de migrantes descansaban en las inmediaciones del puente sobre el río que separa Tecún Umán de la localidad fronteriza de Ciudad Hidalgo, fueron llegando soldados de la Guardia Nacional mexicana con escudos antimotines, en anticipación del próximo movimiento migratorio.

Recientemente el gobierno mexicano anunció que a quiénes entren a su territorio sin registro no se les permitirá pasar de la zona fronteriza, lo cual no sucederá con aquellos que busquen asilo, a quienes se les permitirá legalizar su estatus.

La nueva caravana de migrantes que busca mejorar sus condiciones de vida en Estados Unidos, y que huyen de la violencia, la pobreza y el desempleo en sus países, está conformada mayoritariamente por hondureños.

Ante esta situación, el mandatario mexicano, Andrés Manuel López Obrador, ofreció este viernes unos 4.000 empleos en el sur de México a los migrantes de la caravana. Mientras varios de los migrantes insisten en que su objetivo es entrar a territorio estadounidense, otros han manifestado simpatía por el anuncio de AMLO.

Cabe destacar, que el presidente estadounidense, Donald Trump, ha presionado a Guatemala, Honduras y El Salvador a firmar acuerdos para contener la migración ilegal, que obliga a solicitantes de asilo en Estados Unidos a esperar en el norte centroamericano, respuestas a sus solicitudes. Esta decisión ha sido repudiada por activistas que señalan que Trump busca crear "una jaula" para migrantes.