Marruecos inició este jueves el envío de ayuda médica y humanitaria a Líbano tras la devastadora explosión que este martes sacudió el puerto de Beirut y causó la muerte a más de 135 personas, hirió alrededor de 5.000 y provocó considerables daños materiales.

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Para dar comienzo a la operación de emergencia, ocho aviones, cuatro civiles y cuatro C-130, despegaron del aeropuerto de Casablanca y de la base militar de Kenitra. Horas antes, el rey Mohammed VI había dispuesto el envío de la ayuda y el despliegue en Beirut de un hospital de campaña para asistir a los heridos por el suceso.

La instalación cuenta con unidades de cirugía, hospitalización, radiología y esterilización, además de un laboratorio y una farmacia. Será operada por unas 100 personas, entre ellas 14 médicos de diversas especialidades (cuidados intensivos, cirujanos, traumatólogos, otorrinolaringólogos, oftalmólogos, neurocirujanos, pediatras, farmacéuticos y especialistas en tratamiento de quemaduras), enfermeras y otro personal de apoyo médico.

El envío comprende un lote de medicamentos de primeros auxilios, productos alimenticios (alimentos enlatados, legumbres, leche en polvo, aceite, azúcar, etc.), carpas y mantas para acomodar a las víctimas del desastre, y equipo médico para la prevención de la Covid-19, en particular máscaras protectoras, viseras, batas y gel hidroalcohólico.

En total, se prevé el traslado de 295 toneladas de alimentos básicos, 10 toneladas de medicamentos, similar cantidad de equipo médico, y 11 toneladas de material y equipo médico necesario para enfrentar la pandemia de coronavirus.

Este martes, tras de las explosiones, el rey Mohammed VI comunicó sus condolencias al presidente libanés Michel Aoun, en un mensaje que también trasmitió solidaridad al pueblo libanés y a las afligidas familias en medio del difícil momento que atraviesa ese país.