Este sábado el expresidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, salió de la Superintendencia de la Policía Federal de Curitiba, estado de Paraná, y viajó a Sao Paulo donde participará del entierro de su nieto, nieto Arthur, de 7 años de edad, quien murió este viernes a causa de una meningitis meningocócica.

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Tras el viaje, el exmandatario llegó al Aeropuerto de Congonhas en Sao Paulo e ingresó al cementerio Jardín de la Colina, para esperar el servicio de cremación del cuerpo de infante, pautado para este mediodía.

Al lugar llegaron a acompañar a Lula el excandidato presidencial de Brasil, Fernando Haddad y los coordinadores del Movimiento de los Trabajadores Rurales Sin Tierra (MST).

Esta sería la primera vez que Lula abandona la prisión luego de que fuese condenado el pasado miércoles 6 de febrero a 12 años y once meses de cárcel por presunta corrupción y blanqueo de capitales.

El líder brasileño recibió la autorización para salir de prisión por parte de la Justicia Federal este viernes 1 de marzo.

La muerte de Arthur se da un mes después de que falleciera el hermano mayor del expresidente, víctima de un tipo de cáncer que afectó sus vasos sanguíneos.

Para el sepelio de su hermano, Lula solo recibió permiso por parte de las autoridades para asistir a una reunión familiar cuando el cuerpo de Genival Inácio da Silva, ya había sido sepultado, por lo que este rechazó el permiso y decidió permanecer en su celda.