El primer ministro del Reino Unido, Boris Johnson, retó este miércoles a la bancada opositora del Parlamento de Westminster a realizar una moción de censura en su contra, luego de que el legislativo declarara “nula e ilegal” su decisión de suspender las actividades parlamentarias.

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“Ya es hora de que este Parlamento acepte su responsabilidad (…) es hora de que se quite del medio o presente un voto de no confianza en este Gobierno”, afirmó Johnson en rueda de prensa.

Por su parte, los opositores se niegan a realizar elecciones anticipadas hasta tanto no se retire la posibilidad de que el Reino Unido salga de la Unión Europea (UE) sin un acuerdo pactado.

Asimismo, el primer ministro insiste en su posición de realizar el brexit el próximo 31 de octubre con o sin acuerdo con el bloque europeo; la mayoría de la Cámara de los Comunes se opone a la salida de la UE porque generaría un entorno diplomático hostil con europa y ocasionaría graves impactos económicos en el país.

El panorama en el Parlamento es adverso a Johnson, debido que el jefe de Gobierno maneja una minoría de 40 curules, además varios líderes del conservatismo se unieron a la oposición para rechazar un brexit duro.

El líder opositor del Partido Laborista, Jeremy Corbyn, instó a Johnson aplazar la fecha del brexit si quiere elecciones generales. La idea de anticipar los comicios es un desafío del gobernador británico a los parlamentarios, en un contexto en el que tiene las de perder: no cuenta con la mayoría absoluta, debido a la expulsión de 21 de sus diputados conservadores.

A la lista de aprietos de Johnson se suma que en solo tres meses de gestión, el Tribunal Supremo lo amonestó, su propio hermano dimitió de su cargo gubernamental y la Cámara de los Comunes lo ha derrotado en todas las votaciones sobre el brexit.