El gobierno de Tel Aviv, en medio de la agresión contra la Franja de Gaza desde hace tres días y la respuesta dada por los palestinos desde ese enclave, ordenó este jueves la movilización adicional de policías y patrullas de beduinos para contener los incrementados choques entre judíos y árabes en ciudades del interior del país y territorios ocupados.

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En particular, el ministro de Defensa, Benny Gantz, ordenó la movilización de diez compañías de la Patrulla Fronteriza en la reserva para reforzar las acciones de la Policía y frenar los enfrentamientos entre árabes y judíos en varias ciudades del país.

Ello implicaría un "despliegue masivo" de fuerzas de seguridad para acabar con la violencia interna en el país.

Gantz comentó a medios israelíes que las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI, ejército israelí) participarán en operaciones policiales que no sean parte de las misiones del ejército. "Estamos en un estado de emergencia con un trasfondo nacionalista", y ello requiere el uso masivo de fuerzas "para imponer la ley y el orden", dijo. 

Por su parte, el primer ministro Benjamin Netanyahu declaró, junto a una batería que participa en la operación Cúpula de Hierro, que continuarán actuando con "mucha firmeza, tanto a la defensiva como a la ofensiva", para restaurar la paz en el Estado de Israel.

Agregó que las FDI pronto superarán la cifra de 1.000 objetivos atacados, y continuarán hostigando a Hamas "mientras protegemos a nuestros ciudadanos", anunció como preludio de nuevos ataques contra el enclave civil de la Franja de Gaza.

A su vez, el portavoz militar de Hamas, Abu Obeida, pidió este jueves un levantamiento de los árabes israelíes y advirtió con una escalada: "(Israel) encontrará nuestras protestas (en las ciudades) cuando vuelva a la agresión", dijo, al tiempo que elogió a los árabes israelíes que participaron en los protestas. 

Obeida agregó que las FDI "vieron solo algunas de las capacidades que tenemos en nuestras manos" para atacar a Tel Aviv, Jerusalén, Dimona y otras localidades, y reiteró la determinación de darlo todo por Jerusalén.

La escalada de tensión entre israelíes y palestinos ha alcanzado su punto álgido tras semanas de creciente hostilidad, agravada durante por ataques a lugares de culto, las golpizas de colonos judíos a palestinos y la tentativa israelí de expulsar a palestinos residentes en Jerusalén Este, entre otros hechos.

Desde el lunes pasado, al menos 83 personas han muerto en Gaza por la agresión de Israel, el cual ha sido respaldado por Estados Unidos en medio del silencio del Consejo de Seguridad de la ONU.