La Organización Mundial de la Salud (OMS), el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef) y la Federación Internacional de la Cruz Roja, instaron este jueves al continente africano a aplicar medidas para la prevención y el control de la Covid-19 en las escuelas durante la reapertura de esos centros docentes.

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En este sentido, la directora de la Oficina Regional de la OMS para África, doctora Matshidiso Moeti, advirtió que “del mismo modo que los países están abriendo sus negocios con métodos seguros, podemos reabrir las escuelas”.

Además, la funcionaria señaló que “la decisión debe basarse en un análisis detallado de riesgos que garanticen la seguridad de los niños, los maestros y los padres, y en medidas clave como el distanciamiento físico".

Al respecto, tanto la OMS, como la Unicef y el Comité Internacional de la Cruz Roja instaron a implementar estrictos protocolos de prevención ante la Covid-19 como escalonar el comienzo y el final de la jornada escolar, cancelar los eventos escolares que crean hacinamiento y espaciar los pupitres cuando sea posible.

Asimismo, sugirieron “proporcionar instalaciones para lavarse las manos, usar máscaras, evitar el contacto innecesario y asegurar que los estudiantes y profesores enfermos permanezcan en sus casas”.

De igual forma, recomendaron una serie de medidas de higiene y desinfección como “el frecuente lavado de manos, la desinfección y limpieza diaria de las superficies y poseer instalaciones básicas de agua, saneamiento y gestión de desechos”. Esta última, aseguran, es una condición de la que carecen millones de niños en el continente africano.

Por otra parte, según una investigación de la OMS en 39 países del África Subsahariana solo seis naciones continúan con la totalidad de escuelas abiertas, mientras que en otros 19 los colegios permanecen parcialmente abiertos, y en 14 se cerraron sus puertas totalmente.

Dicha interrupción de los sistemas educativos, alertan, ha tenido repercusiones, destacándose, entre estas, la “mayor exposición a la violencia y la explotación, embarazos infantiles, peores niveles de nutrición e incremento del estrés”, entre otros factores.

“Las escuelas han allanado el camino al éxito para muchos africanos. También, proporcionan un refugio seguro para que muchos niños que viven en circunstancias difíciles se desarrollen y prosperen”, agregó la titular regional de la OMS.