La Red Nacional en Defensa de los Derechos Humanos en Haití denunció este lunes que alrededor de 70 personas murieron durante los enfrentamientos que tuvieron lugar recientemente en la capital.

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Entre las víctimas de los recientes actos de violencia, que estallaron el pasado 28 de febrero como consecuencia de las hostilidades entre las bandas lideradas por Kempes Sanon y Krache dife, se reportan embarazadas, niños y ancianos.

El coordinador de la Red Nacional, Pierre Esperánce, denunció la inactividad de la Policía ante los trágicos sucesos en los que perdieron la vida decenas de personas mientras apuntó que actualmente se registra una frágil calma.

En este sentido, más de la mitad de Puerto Príncipe se encuentra dominada por las pandillas, las cuales extorsionan, secuestran y asesinan tanto a haitianos como a extranjeros, así como funcionarios estatales y comerciantes.

Al mismo tiempo, las violentas condiciones obligaron al cierre de escuelas y hospitales cuando medios locales registran más de 150 raptos en el transcurso del presente año.

A su vez, la red nacional destacó que más de 1.500 personas, entre las cuales son mayoría las mujeres y niños, se encuentran viviendo en condiciones inhumanas en cuatro campos de desplazados enclavados en Poste Marchand.

De igual forma, se contabilizan aproximadamente 50 desaparecidos, entretanto, cientos de casas han sido incendiadas, por lo que muchas familias han perdido el patrimonio que acumularon por décadas.