El Gobierno de Sri Lanka confirmó este domingo que la serie de explosiones registradas en varias localidades del país fueron un ataque terrorista, por lo que establecieron el toque de queda con efecto inmediato, informó la secretaria del mandatario, Maithripala Sirisena.

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Como medida adicional, el Gobierno cerró el acceso a las redes sociales y servicios de mensajería, incluidos WhatsApp, Viber y Facebook, informaron medios locales.

Ante estos anuncios, las misas de Pascua de la tarde fueron canceladas en todo el país.

Hasta los momentos se han registrado ocho explosiones en la nación, que afectaron una iglesia cristiana y tres hoteles de lujo en Colombo, la capital del país, y dos templos cristianos en las afueras de la ciudad, incluida la iglesia de San Sebastián en la ciudad de Negombo.

Como consecuencia de estas agresiones, más de 180 personas fallecieron y al menos 500 heridas, según determinaron las autoridades.