La Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO, por sus siglas en inglés), alertó este sábado que los enjambres de langosta del desierto en Etiopía, Kenia y Somalia representan una amenaza internacional.

LEA TAMBIÉN:

ONU insta actuar de inmediato para evitar guerra civil en Libia

En un comunicado, el ente destacó que esta especie invasora constituye un “potencial destructivo sin precedentes”, por lo que se deben incrementar los esfuerzos para combatirla y que no lleguen a otros países de África oriental, Oriente Medio y Asia.

El director de la FAO, Qu Dongyu, señaló que las langostas del desierto ponen “en peligro la seguridad alimentaria de toda la subregión”, debido a que se trata de una especie devoradora de cosechas que, por su rápida reproducción, podría estar multiplicada por 500 para el próximo mes de junio.

“Cuando hay buena vegetación migran, pero originalmente no es eso lo que les ha traído aquí: estaban huyendo de donde se habían reproducido hacia otra zona, llegaron, encontraron comida y se quedaron”, destacó por su parte el director para el este de África de la Organización para el Control de la Langosta del Desierto (DLCO), Stephen W. Njoka.

Según la FAO, un enjambre de langostas del desierto puede estar compuesto por cientos de millones de ejemplares, cada uno de los cuales ingiere alrededor de dos gramos diarios “en su incesante esfuerzo por alimentarse y reproducirse”.

Como parte de las medidas para contrarrestar la propagación de la especie, la FAO convocó a una campaña de control aéreo, mientras señala que se necesitan 70 millones de dólares para mitigar la plaga, así como proteger los medios de subsistencia de Etiopía, Kenia y Somalia, los tres países más afectados.