Este viernes, durante un acto público en Chuquisaca, el presidente de Bolivia, Evo Morales, rechazólas declaraciones de una senadora opositora que pedía acudir a la Administración para el Control de Drogas (DEA) para reforzar la lucha antidrogas, ante una supuesta crisis institucional de la policía en el país suramericano.

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La senadora Carmen Eva González declaró la víspera que la DEA debería volver, debido al proceso judicial que enfrenta el coronel y exdirector de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (Felcc) de Santa Cruz, Gonzalo Medina, y el capitán Fernando Moreira, por presuntos delitos de sustancias controladas y nexos con el extraditable Pedro Montenegro Paz, entre otros.

Frente a esto, Morales acusó a la derecha boliviana de no tener dignidad al pedir el retorno de esa agencia, expulsada en 2008 por conspiración y financiamiento de grupos delictivos, mientras aseguraba que investigarían esos hechos que dañan la imagen de la Felcc y sancionar a los culpables con todo el rigor de la ley, durante un acto público en Chuquisaca.

”Si algún policía está metido con el narcotráfico no vamos a perdonar, porque como institución la policía ha dado buena imagen. Sin la DEA, sin bases militares, con la participación de las Fuerzas Armadas nuestro modelo es respetado y admirado en el mundo”, reafirmó Evo Morales.

Desde 2008, Bolivia inició su propio modelo antinarcóticos, basado en el diálogo, la prevención, la búsqueda de alternativas y el control social. La estrategia boliviana promueve la erradicación de las plantaciones sin violencia, sin matanza de campesinos, ni fumigaciones que destruyan las selvas. Como resultado de esta política, Bolivia es el país sudamericano productor de la hoja de coca con menor área de cultivos.