Un grupo de migrantes latinoamericanos accedió este viernes a las oficinas de la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) de México para solicitar protección ante las autoridades migratorias para continuar viaje en caravana y agilizar su situación legal.

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El colectivo varado en la ciudad de Tapachula, Chiapas, en la frontera con Guatemala, exige que los atienda el Instituto Nacional de Migración (INM) después de cuatro días de espera.

Somos alrededor de 3.721 migrantes enlistados, dijo una representante, pero hay muchos que no se han anotado. Según sus cálculos, totalizan 2.122 hombres, 1.307 mujeres y 624 niños.

Entre las damas hay muchas embarazadas, que han perdido a sus hijos “debido a la mala situación de la calle, porque nadie tiene para pagar alquileres u hoteles”, afirmó la vocera.

Exigen que les den respuesta sobre sus documentos migratorios y les autoricen a transitar en una caravana sin que la policía los detenga, los criminalice o los deporte.

También piden que les faciliten porciones de agua y comida, medicamentos y atención médica, porque están agotados, físicamente débiles y únicamente desean continuar camino hacia su destino final.

El grupo está compuesto por dominicanos, venezolanos, cubanos, centroamericanos y de otros países del continente.

Durante el primer semestre de este año, México recibió una cifra récord de 58.000 solicitudes de refugio, un 15 por ciento más que en igual periodo de 2021.

La región se inscribe en la ruta migratoria más utilizada para arribar a los Estados Unidos, cuya Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP, en inglés) ha contabilizado a casi 1.6 millones de personas desde octubre pasado.