El ministro de Asuntos Exteriores de Irán, Hosein Amir Abdolahian, emitió el miércoles un declaración en conmemoración de los 35 años del ataque químico del régimen baasista de Irak a la ciudad iraní de Sardasht en 1987, denunciando vínculos de Estados Unidos y sus aliados occidentales en el crimen.

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De acuerdo con el canciller, “la luz verde de algunos gobiernos occidentales, el conocimiento técnico requerido para la producción de armas químicas, materias primas, equipo de producción de armas químicas y ayuda financiera han sido proporcionado al régimen de Sadam durante años”.

Añadió además que las implicación de la comunidad internacional fue un punto clave para el el ataque químico contra el pueblo de Sardasht, en aquella época.

Asimismo el ente señaló que las deficiencias del actual sistema legal y penal internacional para enjuiciar a los autores del nefasto hecho, obstaculiza la toma de decisiones legales, así como  los esfuerzos para aliviar el sufrimiento físico y mental de las víctimas

“Las sanciones coercitivas unilaterales de Estados Unidos ha dificultado el suministro de los medicamentos y el equipo médico que necesitan las víctimas de los ataques químicos”, denunció el funcionario.

Vale recordar que a raíz de la masacre el 29 de junio de 1987, Sardasht, al menos 110 civiles iraníes fallecieron, y 8.000 fueron heridos, dejando a algunos de ellos permanentemente discapacitados.