Continúan las protestas y movilizaciones en Francia en medio de la crisis epidemiológica que vive el país y contra la "dictadura sanitaria", como denominan a las últimas medidas del Gobierno para frenar la pandemia de la Covid-19.

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Los manifestantes denunciaban con gritos y carteles la "dictadura sanitaria", y exigían "dejar en paz mi cuerpo" refiriéndose a la presión del Gobierno para que la gente se vacune. De igual manera enunciaban que "la Covid mata la democracia", demostrando así el descontento social.

En París una manifestación se congregó en la zona de la Plaza del Louvre y se trasladó hacia el Ministerio de Sanidad de Francia. Otra concentración fue organizada en dicha capital por el pequeño partido ultraderechista Los Patriotas.

El primer ministro francés, Jean Castex, en un recorrido hacia Anglet (Pirineos Atlánticos) subrayó este sábado que "la línea es clara: debemos vacunarnos" y acotó que "entiendo a los reticentes que se manifiestan, pero creo que hacer falta convencer, a toda costa a todos nuestros conciudadanos para que se vacunen".

En su sitio oficial la Confederación Nacional del Trabajo (CNT) emitió sus consideraciones al respecto de  las recientes medidas tomadas por el presidente de Francia Emmanuel Macron como parte de la gestión gubernamental para frenar la pandemia del Sar Cov-2 que incluyen además de la vacunación obligatoria por el personal sanitario u otras profesiones, la ampliación de la necesidad de poseer un certificado sanitario para acceder a la mayoría de los lugares públicos.  

“Poner la carga en los no vacunados es la estrategia presidencial”, denunció el colectivo nacional, el cual hizo un balance sobre la desatención sanitaria a inicio de la pandemia cuando las máscaras no servían, en que escaseaba el gel desinfectante y que los cuidadores estaban obligados por ley a ir a trabajar sin tener todos los medios de protección.

“Fiel a su práctica, el Presidente estigmatiza a una parte de la población, más concretamente a los trabajadores y principalmente a las trabajadoras: el personal asistencial y no asistencial de los hospitales, las residencias de ancianos, la ayuda a domicilio”, acotó la organización.

“Héroes y heroínas de esta crisis, hoy son irresponsables y ponen en peligro a la población porque supuestamente son reacios a vacunarse... ¿A quién queremos engañar?”, reflexionó la congregación, quien además exigió que las patentes pasen a ser de dominio público y que los laboratorios privados dejen de generar miles de millones de beneficios con la salud.

La variante delta supone más del 67  por ciento de todos los nuevos contagios detectados en Francia, según declaraciones del Ministerio de Sanidad. Por su parte el Centro Johns Hopkins contabilizó un total de 5.906.448 positivos a la Covid-19 en Francia desde el inicio de la pandemia, y un acumulado de 111.641 decesos.