La Fiscalía de Surinam informó el miércoles que el expresidente Desi Bouterse tiene hasta el viernes para presentarse en el centro de detención donde cumplirá condena de 20 años de privación de libertad por el asesinato de 15 opositores durante su primera período presidencial en 1982.

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El exmandatario, de 78 años de edad, se ausentó de la vista celebrada el pasado 20 de diciembre en la que se ratificó una condena que comparte con cuatro acusados más por delitos de lesa humanidad y represión en un proceso que se ha extendido por 16 años.

“El Ministerio Fiscal ya procedió a la ejecución de las sentencias de apelación y los condenados deberán presentarse en el penal el 12 de enero de 2024, según consta en los registros, para hacer efectivas sus condenas", destacó el órgano judicial en un comunicado divulgado por la prensa local.

El político se dirigió a una multitud de seguidores que fueron a mostrarle su apoyo el 16 de diciembre, días antes de conocerse el veredicto condenatorio del tribunal. Sus partidarios exigían su libertad inmediata con el lema “Libertad para Bouta”, refiriéndose al apodo con que lo conocen sus acólitos.

"No sembremos el caos. Aguantemos hasta las elecciones de 2025", dijo entonces el ex gobernante surinamés en una intervención considerada como un llamamiento a la calma. No obstante, advirtió que "las cosas se nos pueden ir de las manos", aludiendo a posibles causas  que podrían provocar su encarcelamiento.

Expertos consideran que aunque la voluntad de la Fiscalía es ejecutar la sentencia, Boutarde no irá a prisión, entre otras razones porque le queda la posibilidad de solicitar un indulto a través de una negociación con sus acusadores.

Boutarde llegó al poder por primera vez en 1982, cuando encabezó un golpe militar, etapa en la que se reportaron asesinatos selectivos de varios opositores que enfrentaban a su gobierno. Posteriormente, en 2010, fue electo presidente, cargo en el que se mantuvo hasta 2020.