Aunque el llamado de las autoridades chilenas es no asistir a estos a los bancos, dado que el trámite solo podrá realizarse desde el día jueves de esta semana, y a través de internet, la mañana del lunes se han registrado extensas colas a las afuera de las Administradoras de Fondos de Pensiones (AFP) en distintos puntos de la capital, por personas que han ido a retirar el 10 por ciento de sus fondos.

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La reacción de la población llega tras haberse aprobado la semana anterior una ley de emergencia que permite el retiro de un 10 por ciento de los fondos de pensiones como medida para aumentar el poder adquisitivo de la población en medio de la crisis económica provocada por la pandemia de la Covid-19 en Chile, la más grave en 35 años según el Banco Central.

Sin embargo, como se informó durante el fin de semana, apenas aprobada la ley, la misma comenzará a funcionar apenas el jueves, los trámites solo podrán realizarse por internet y las AFP se han comprometido reforzar sus páginas web para evitar que se caigan, por lo que han hecho un  llamado a la población para que no vayan a la sucursal porque no el trámite no tendrá lugar allí".

La retirada de fondos era resistida por la derecha chilena y los sectores empresariales, pese a que se calcula que reactivará el consumo y tendrá un impacto positivo del 3 por ciento en el PIB, gracias a los 20.000 millones de dólares que podrían ponerse en circulación. 

Los chilenos, con la nueva legislación, tendrán un año para la retirada de su dinero pero en este tiempo es muy probable que el actual sistema de jubilaciones empiece a tener los días contados, pues el 25 de octubre se celebrará, según el Gobierno de Piñera, el referéndum que, como vaticinan las encuestas, convalidará la redacción de una nueva Constitución donde el modelo de pensiones será también reformado.