La conmemoración por el primer aniversario de la muerte, a manos de Carabineros, de un manifestante en Santiago de Chile, terminó con la utilización de camiones lanzagua y tres personas detenidas este lunes.

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Los Carabineros de Chile (policía militarizada) intervinieron en el acto de homenaje el cual tenía lugar en el centro de Santiago al cumplirse un año de la muerte de Mauricio Fredes, un joven que falleció mientras era perseguido por las fuerzas del orden durante el estallido social de 2019.

En la represión de la manifestación, el cuerpo de Carabineros utilizó bombas lacrimógenas y camiones lanzagua para dispersar a las personas que llegaron hasta la Alameda, la calle principal de la capital chilena, mientras recordaban a Fredes en la misma esquina donde perdió la vida.

Tres personas, acusadas de causar desórdenes en el lugar, fueron detenidas por las fuerzas policiales.

Mauricio Fredes murió el 27 de diciembre de 2019 a la edad de 33 años por asfixia con una causa de muerte de asfixia por sumersión, según reveló en su momento la autopsia del Servicio Médico Legal (SML), cuando cayó a un pozo lleno de agua que contenía cables eléctricos, mientras intentaba escapar de un vehículo policial durante una protesta. 

El estallido social es una crisis que comenzó con una serie de manifestaciones antigubernamentales en la capital de Chile en octubre de 2019, el cual, en definitiva, dio lugar a un proceso de masivas protestas ciudadanas con los cuales exigieron cambios en el sistema económico neoliberal.

A partir de entonces, los manifestantes han organizado protestas todos los viernes. Exigen reformas económicas y la renuncia del presidente Sebastián Piñera.

Este movimiento dio paso al proceso constitucional que inició en el país el 25 de octubre con un plebiscito ciudadano donde la opción a favor de una nueva carta magna se impuso con un 78 por ciento de los votos.