Grupos y organizaciones sociales que representan a los presos políticos del estallido social de 2019 en Chile se manifestaron este viernes en la capital chilena, en una nueva acción para reclamar la excarcelación de sus familiares y compañeros.

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Las acciones en las calles tuvieron lugar poco después que una agrupación de sobrevivientes de la revuelta social expusiera ante la Comisión de Derechos Humanos de la Convención Constitucional, la misma exigencia, así como la investigación de las violaciones ocurridas durante el estallido social.

Los manifestantes en la Plaza de la Dignidad se movilizaron bajo la consigna que Sin Indulto no hay paz y que no van a soltar las calles hasta suelten al último preso político, en referencia no solo a los encarcelados en 2019, sino a los de otros procesos de protesta social.

La demostración de este viernes es parte de las manifestaciones que cada viernes se suceden en los alrededores de la Plaza de la Dignidad en reclamo de las principales exigencias en la mesa desde 2019, y es acompañada por cacerolazos nocturnos en varias ciudades del país.

Tras varias horas de presencia de los manifestantes, fueron expulsados con la utilización de carros lanzaaguas del cuerpo de Carabineros, así como se produjeron ataques directo a miembros de la prensa y observadores de DD.HH., además del uso de perros adiestrados contra las manifestaciones.

El estallido social en Chile generó una ola de protestas masivas desde 2019. Lo que había comenzado por un aumento en los precios de los servicios públicos se convirtió en un masivo movimiento social que exigía una reforma constitucional y cambios en el sistema económico chileno, en discusión ahora en la Convención Constitucional.