El Gobierno de Chile anunció este lunes la extensión del cierre de sus fronteras hasta el próximo 30 de junio, en un intento por contener la pandemia de la Covid-19 en la nación suramericana.

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El ministro de Salud, Enrique París, explicó que, aunque otros países han flexibilizado la entrada a su territorio a los visitantes ya vacunados, Chile aún no, como medida de protección ante la posible entrada y proliferación de las nuevas cepas del virus.

La aplicación de este segundo cierre se inició el pasado 5 de abril y estaba prevista hasta el día 15 de junio, pero ante la creciente proliferación de casos en el país andino, que en los últimos días ha oscilado entre los 6.000 y 8.000 contagios diarios, se decidió extenderla.

Dicha medida afecta a los turistas interesados en ingresar al país, así como a los ciudadanos chilenos y extranjeros residentes, quienes solo en situaciones excepcionales asociados a urgencias médicas, razones humanitarias o abandono definitivo del país, podrían desplazarse tras solicitar un permiso a Carabineros de Chile.

En conferencia de prensa, París reconoció que una de las principales preocupaciones era la diseminación de la denominada variante Delta del Virus, detectada en la India y con un grado de contagio superior hasta casi en un 50 por ciento respecto a la británica Alfa.

El rebrote del virus en Chile ha puesto nuevamente a los hospitales y sistema de salud al límite, mientras que ha obligado a tomar otras medidas como el establecimiento de cuarentenas y toque de queda entre las 22H00 (hora local) y las 05H00 (hora local).

Desde marzo de 2020, 1.434.884 personas se han contagiado en Chile con el Sars-Cov-2, mientras que en el último balance la cifra de fallecidos llega a los 30.058, al registrarse 121 decesos.